La última sesión del año del Honorable Consejo Deliberante, con la actual conformación, fue el jueves 7. Trató muchos y diversos temas. Trataron un pedido de informes por las termoeléctricas que legalizaron ellos mismos. Los damnificados presentes se alteraron, porque no les aprobaron su proyecto que clausuraba las obras.
Generaron un tumulto ante la impotencia de no ser oídos, de que no se considere su derecho a que no se altere su forma de vida, por una decisión arbitraria de nuestros políticos. Los concejales, en lugar de llevar las termoeléctricas a zonas industriales, modificaron la zonificación de las parcelas donde se desarrollan.