El presidente de la Comisión de Pastoral Social leyó el vienes el documento final de la 106 asamblea plenaria de la Conferencia Episcopal Argentina, realizada en Pilar, titulado "El drama de la droga y el narcotráfico” e hizo un llamado a la dirigencia política y a la sociedad, advirtiendo sobre el crecimiento del narcotráfico en Argentina y reclamando al estado, combatir a las organizaciones criminales para evitar que el país sucumba ante este flagelo como México y Colombia.
Los obispos indicaron que “el desafío es enorme y el poder de corrupción y extorsión de los grupos criminales es grande. Pero no es verdad que ‘nada se puede hacer’”.
“La Argentina está corriendo el riesgo de pasar a una situación de difícil retorno. Si la dirigencia política y social no toma medidas urgentes, costará mucho tiempo y mucha sangre erradicar estas mafias que han ido ganando cada vez más espacio”, “es alarmante la expansión de las llamadas drogas sintéticas, que se distribuyen en diversos espacios festivos, y nos duelen las conductas autodestructivas en adolescentes o jóvenes que consumen diversas sustancias”, “perseguir el delito es tarea exclusiva e irrenunciable del Estado. Recogemos también la preocupación por la desprotección de nuestras fronteras, y por la demora en dotar de adecuados sistemas de radar a las zonas más vulnerables. Lamentamos que el organismo del Estado dedicado a coordinar las políticas públicas en esta materia lleve tantos meses sin tener su responsable designado”, aseguraron con autocrítica que “no hemos sido suficientemente eficaces en promover una pastoral que convoque y contenga a los adolescentes y jóvenes”, los obispos pidieron no dejar que “nos roben la esperanza, ni que se la arrebaten a nuestros jóvenes. Cuidémonos los unos a los otros… Trabajemos por una cultura del encuentro y la solidaridad como base de una revolución moral que sostenga una vida más digna”.
El estado intentó una respuesta por medio del subsecretario de la Sedronar, Salvador Julio Postiglioni, que aseguró hoy que el organismo no está "paralizado" a pesar de que no cuenta con un secretario y sostuvo que los números de la Argentina "en el tema droga no son los peores del mundo ni de la región".
La realidad según la vemos, es que los narcos se manejan sin problemas, significa que varios funcionarios y políticos han sido comprados, o dicho de otra forma son financiados por su dinero. Solo se decomisa algo de droga, cuando se peléan entre narcos.
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