El sindicado líder de una banda de delincuentes que se dedicaba a la comercialización de autos de alta gama robados fue detenido en una casa de un country de Pilar, mientras que otros 13 acusados fueron apresados en el conurbano bonaerense y en las provincias de Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos. Además, en distintos allanamientos la policía secuestró 41 autos y camionetas robados, valuados en cerca de 2.000.000 de dólares.
Según el ministro de Seguridad bonaerense, Ricardo Casal, la pesquisa se inició hace dos meses cuando se detectó la existencia de una organización dedicada a la comercialización en diversos puntos del país de autos de alta gama robados por delincuentes que operaban en el conurbano.
El núcleo de la banda estaba integrado por personas que compraban los autos robados en las calles por ladrones armados y luego adulteraba las patentes y los documentos necesarios para poder revenderlos en concesionarias de Pilar, Córdoba y Santa Fe.
El ministro identificó al cerebro de la organización como Norberto Daniel González, apodado El Dany, quien vivía y tenía su base de operaciones en el country Club del Campo Pueyrredón, en Pilar. "En ese lugar —dijo Casal— González falsificaba la documentación y preparaba los autos para su reventa".
Además de González fueron detenidos otros 13 hombres acusados de integrar la organización criminal, entre ellos dos que, según la pesquisa, robaban a mano armada los autos en distintas zonas del conurbano.
También fueron apresados tres líderes del grupo que operaban en Villa María (Córdoba), al tiempo que se realizaron otros arrestos en la provincia de Santa Fe y en Paraná, Entre Ríos.
Logística. Las fuentes explicaron que una vez comprados a los delincuentes los autos robados, la banda ordenaba su distribución en distintos depósitos donde los mantenían ocultos hasta tanto consiguieran alguna patente sin impedimentos para colocarle y, en base a ella, adulterar la documentación.
"Ellos robaban patentes a autos de la misma marca que estaban estacionados en la calle y se las colocaban a los autos robados. Luego confeccionaban la documentación con sellos, formularios y firmas apócrifas para poder revenderlos en concesionarias o a particulares", explicó uno de los pesquisas.
La maniobra que permitía a la banda operar con mayor impunidad consistía en entregar junto a los autos un oficio judicial que indicaba que ese auto formaba parte de un lote de rodados que habían sido secuestrados por la Justicia y que, antes de ser rematados, se ofrecían a la venta a un precio menor.
Entre los vehículos secuestrados, detallaron las fuentes, hay Audi, Toyota Hilux, Volkswagen Amarok, Volkswagen Vento, Volkswagen Bora y algunos modelos costosos de Fiat y Renault. Los rodados fueron secuestrados en 25 allanamientos realizados en los partidos de Pilar, San Martín, San Isidro y Tres de Febrero, como así también en concesionarias de ciudades de Entre Ríos, Córdoba y Santa Fe. l
Fuente Télam